ALEXANDRINA Y LA JUVENTUD

Marzo 2006

 

 

Estaba preparada la cruz, faltaba la víctima

En el coloquio del 5 de diciembre de 1947, Jesús le habla así a la Beata Alejandrina:

Eres  mi víctima a quien le he confiado la más alta misión. Y como prueba de esto, atiende bien lo que te digo para que lo sepas decir bien.

Ha pasado casi un siglo de que yo mandé a esta privilegiada feligresía, la cruz que era señal de tu crucifixión.

No mandé rosas, porque no tenía, sólo tenía espinas; no eran de oro, porque ese oro junto con piedras preciosas serías tú con tus virtudes, con tu heroísmo para adornarla. La cruz fue de tierra, y la misma tierra la preparó.

Estaba preparada la cruz, faltaba la víctima, que en los planes divinos ya estaba escogida. fuiste tú.

El mal aumentó, la onda de los crímenes llegó a su auge, la víctima tenía que ser inmolada; llegaste, fue el mundo quien te sacrificó.

Y ahora partes para el cielo y la cruz quedará hasta el fin del mundo, como también quedó la mía.

Fue la maldad humana quien preparó la mía, y esa misma maldad humana preparó la tuya.

¡Oh, cómo son admirables los designios del Señor! ¡Cómo son grandes y admirables! ¡Qué de encantos tienen!

Ocho años después, el 21 de enero de 1955, insistió:

Hace más de un siglo que mostré la cruz a esta tierra amada, la cruz que vino a esperar a la víctima. ¡Todo como prueba de amor!

¡Oh, Balasar, si no me correspondes!...

Cruz de tierra para la víctima que de la nada fue sacada, víctima que fue escogida por Dios y que siempre existió en los planes de Dios.

¡Víctima del mundo, pero tan enriquecida de las riquezas celestes, que da todo al Cielo, y por amor a las almas acepta todo!

¡Confía, cree, hija mía! Yo estoy aquí. Repite tu «creo». Confía!

El matrimonio Signorile, en el prólogo del libro Figlia del dolore, madre di amore, bajo el título de «La Cruz y la Crucificada», después de trazar una amplia descripción de Balasar, escribe:

Desde 1832, por varios años, Balasar fue la meta de peregrinaciones en honra de una Cruz aparecida misteriosamente en la tierra, a pocos metros de la actual iglesia. Para protección de esta Cruz fue construida una Capilla, aún existente, que tiene al frente la fecha 1832, esculpida en piedra. Durante años existió también una Cofradía, con el fin de promover la fiesta de la Santa Cruz de Balasar.

Más o menos un siglo después, Balasar vuelve a ser meta de numerosas peregrinaciones: la gente es atraída por la fama de Alejandrina María da Costa. que allí vivió muchos años, "crucificada".

En los escritos de la Beata Alejandrina, existen textos polémicos, y se diría que aparentemente heréticos. lo que sigue, del día de Todos Santos de 1944, -fecha que tanto tiene que ver con la cruz- donde ella ocupa un lugar principal:

Escribe todo, escribe, hija mía.

Si lo que te digo quedase oculto, de nada le valdría al mundo.

Madre de los pecadores, nueva redentora, sálvalos, sálvalos.

Eres la nueva redentora, escogida por Cristo.

Nunca ha habido ni volverá a haber una víctima inmolada de esta forma, porque nunca ha habido tanta necesidad, como hoy, nunca pecó así el mundo.

Diecinueve siglos han pasado desde que Yo vine al mundo y traigo ahora a la nueva redentora escogida por Mí para recordarles lo que Cristo sufrió, lo que es el dolor, lo que es el amor y mi locura por las almas.

Eres la nueva redentora que viene a salvarlos, eres la nueva redentora que irradiará el amor de Jesús en la humanidad. Nueva redentora que será recordada en cuanto el mundo sea mundo.

Jesús le llama aquí redentora por seis veces. El mayor estudioso y más categorizado interprete de la Beata, el Padre Humberto Pasquale, salesiano, al traducir sus escritos para el italiano, sustituyó esta palabra por co-redentora. en una nota que aquí se transcribe, escribe lo siguiente:

«En el original está la palabra "redentora". para entenderla en su modo más justo debe ser vista dentro de su contexto. De hecho, quien opera en Alejandrina es solamente Jesús: Lo afirma muchas veces.

Como Cabeza del cuerpo místico, actúa en cada uno de sus miembros, hace propios sus actos y los enriquece con sus méritos infinitos; los ofrece al Padre Eterno, como cosa suya en favor de las almas.

Es Dios quien da el incremento... nosotros solamente somos siervos "inútiles", como enseña San Pablo. Esto es tan verdadero que el alma mística sabe, por experiencia, que no hace nada, se siente sin voluntad propia, no es dueña de nada, no cuenta para nada sino es con Jesús.

Su vida es un perenne abandono en Él; siente que si le faltase la ayuda de la Alto, sería incapaz  al hacer lo que sea, con la excepción de pecar.

Todo el Diario de Alejandrina habla de eso y lo confirma .»

Sabemos que así es, pero aquellas palabras -y aún otras semejantes- impresionan, el Padre Humberto las cita en el prefacio de Cristo Jesús en Alejandrina.

La Santa Cruz de Balasar no apareció por casualidad.